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¡Lo siento!

El falso arrependimiento

Con los años esta palabra para mí ha quedado marcada, com­prendí que la palabra “lo siento” sin haber un cambio de conducta no significa nada, son palabras “al viento”. La persona que te pega una y otra vez o quizás te esté machacando psico­lógicamente, después cree que con apenas un “lo siento” todo está arreglado.

A veces, un ‘lo siento’ en voz alta esconde el reverso de la falsedad

La persona maltratadora siempre seguirá siendo maltratadora, ojo, hay casos que el maltratador jamás irá a maltratar a su víc­tima delante de otras personas, porque esto lo comprometería. Cuando alguien te dice “lo siento”, sería para corregir un proble­ma y solucionarlo y hay que tener en cuenta que si la otra persona solo lo utiliza para apaciguar y después vuelve a cometer el mismo error, lo que recomendaría seria usar la palabra disculpa:

Tu pareja te maltrata cuando te dice constantemente:

– No haces nada bien

– No sirves para nada

– Quien te va a soportar.

– Eres subnormal.

– Esto es cosa de tu cabeza.

– Ya no soporto que llores todo el rato.

– Si me dejas ¿quien te va a querer?

– Todo lo que tienes es gracias a mí.

– Sí me pides el divorcio te destrozo la vida.

– A ver si podrás sobrevivir solo.

Podría poner muchos ejemplos, pero pasaríamos un largo rato, debes aprender a distinguir la palabra “disculpa” con “lo siento” ya que para el maltratador el “lo siento” en verdad es su manera de hacerte creer que realmente está arrepentido cuando no es verdad.

El manipulador lo que hará será intentar alejarte de cualquier persona que pueda darte un consejo (yo no estoy a favor de con­sejos entre parejas y sí de opinión, siempre creí que una relación está basada en dos personas y que hay que hacer todo lo posible para intentar arreglar cualquier problema sin la necesidad de lle­gar a la agresión tanto verbal como física) 45

Mientras estés anclado emocionalmente jamás podrás avanzar, según un estudio psicológico nos cuesta olvidar a una persona cuando la relación fue muy intensa, sin embargo, por más que lleves 40 años y llega el día que decides marchar, el maltratador cuando ve que ya está cansado de jugar contigo te dejará ir, pero con una condición, de verte desestabilizado tanto emocional­mente como financieramente.

Debemos tener cuidado con este tipo de situaciones, son altamente dañinas y dan forma a un tipo de manipulación inculpatoria.

@todos los derechos Reservados: Robson Marins, escritor, bloguero, pensador, estudiante de psicología, amante de la literatura.