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Destructores de la autoestima

Personas que intentan destruir nuestra autoestima

Como seres humanos necesitamos de un ambiente social para desarrollar nuestro crecimiento, sin embargo, existen unas cuantas personas con conductas nocivas, arrogantes y tóxicas, desesperadas en lastimar con mensajes negativos e insultos. Estos tipos de persona se centran apenas en las fallas de los demás, pasando por desapercibido las virtudes y las cualidades morales que el otro tiene, el maltrato verbal es una de las armas más utilizadas para destruir la autoestima.

Cuando alguien vive haciendo comentarios destructivos sobre los demás es porque cree que el individuo es una amenaza y por esto necesitan minar su autoestima ¿cómo identificar estos tipos de persona? Primero tienes que comprender que existe diferentes tipos de personas toxicas.

  • Los prepotentes que se creen superiores a los demás.
  • Las personas negativas.
  • Los envidiosos.
  • Los victimistas.
  • Los mentirosos.
  • Los egocéntricos.
  • El manipulador.
  • Los que están siempre comparando.
  • Las personas falsas

El segundo paso es aprender a protegerse, ya que los destructores del amor propio se disfrazan con una falsa amabilidad, ellos tienen varias interpretaciones, manejan bien sus disfraces, embaucando a los demás para conseguir beneficios propios. Hay un dicho que dice: La gente falsa es amable soló cuando le conviene, pues la gente amable es amable siempre.

Soy una persona muy observadora, sin embargo, intento separar mis prejuicios y analizar las personas que están cerca de mí, me gusta mucho hacerme el tonto, pues es la manera más fácil de detectar a una persona falsa, les hago creer que no estoy escuchando sus comentarios cuando en realidad, mis oídos están atentos.  En este momento es cuando capto la intención y percepción equivocada que tienen sobre mí y te confieso que no me quedé sorprendido, la forma en que empecé a trabajar con mis emociones fue aceptar mi lado oscuro ya que no soy un santo, pero tampoco un delincuente, descubrí que la proyección de los demás sobre mí es un problema de ellos y no mío.

Antes, yo era una persona muy vengativa, cuando alguien me atacaba yo hacia peor, hasta que mi madre me dijo que debería cambiar, porque mi comportamiento no ayudaba en nada y que el único perjudicado era yo y nadie más. Con los años empecé a reeducarme, aprendí a defenderme de la manera más inteligente, ignorando y alejándome de personas destructivas que necesitan siempre alimentar su ego haciendo daño.  

Cuando te sacrificas para agradar a los demás te estás saboteando, estás dando señales que pueden hacer lo que sea contigo, comprendo que tenemos una creencia sumisa, en que tenemos que quedar bien con todos, este miedo de decir que no y que la gente crea que eres mala persona, aprender a hacernos cargo de nosotros mismos, nos hace resistentes a los destructores de la autoestima.

@todos los derechos Reservados: Robson Marins, escritor, bloguero, pensador, estudiante de psicología, amante de la literatura.