Si no sabes adónde quieres ir
Mientras Alice estaba perdida vio al gato de Cheshire y le preguntó:
– ¿Qué camino debería tomar? El gato la contesta
– Si no sabes adónde quieres ir, no importa que camino sigas.
Cuántas personas dicen lo mismo que Alice, no me importa el camino lo importante es que me lleve a cualquier sitio. El refrán que dice que todos los caminos llevan a Roma a veces te puede llevar a una dirección equivocada, hasta incluso los GPS se equivocan, por eso se ha de tener cuidado con las decisiones que uno toma. Mucha gente fracasa porque toma cualquier camino sin, al menos, tener una visión de lo que quiere. Para aprender a planear es necesario saber:
¿Dónde quiero ir?
¿Dónde estoy sobre donde quiero ir?
¿Cómo deseo llegar hasta allí?
¿Qué sacrificios está dispuesto hacer?
¿Qué estoy dispuesto a sacrificar para conquistar lo que deseo?
Entonces resumiendo tú necesitas planear, trazar estrategias y ejecutarlas para que aquello que deseas se haga realidad.
Planear es
Ser: conocer quién eres.
Aprender a convivir: se trata de desarrollar conocimientos sobre los demás, de su historia, tradiciones y espiritualidad. Y a partir de ahí, crea un nuevo espíritu que, precisamente gracias a esta conciencia de nuestro crecimiento interdependencia, gracias a un análisis compartido de riesgos y desafíos del futuro, conducir a la realización de proyectos comunes una gestión Inteligente y apaciguador, de los inevitables conflictos
Capacidad de aprovechar las oportunidades
Capacidad de coger riesgos
Capacidad de pensar de forma creativa
Ser una persona innovada
Optimista
Iniciativa
Cambia tus propias actitudes plantar la semilla de tus sueños atreviendo a Creer, desenvolver y Hacer la diferencia.
Tener una visión emprendedora hará que tengas un propósito en la vida y sobre todo una oportunidad de realizar su sueño.
@todos los derechos reservados: Robson Marins escritor autor de cinco libros, bloguero, pensador, estudiante de educación social, amante de la literatura