una forma invisible de violencia

En el mundo de la salud mental, a menudo hablamos de los efectos devastadores del abuso físico y verbal. Sin embargo, hay otra forma de abuso insidiosa y a menudo invisible que puede ser igual de dañina: el asesinato psicológico.
El asesinato psicológico, también conocido como abuso emocional crónico, es una forma de maltrato que erosiona lentamente el sentido de sí mismo, la autoestima y la confianza de una persona. A diferencia de las formas más obvias de abuso, el asesinato psicológico puede ser difícil de detectar, ya que a menudo se disfraza de preocupación, amor o incluso humor.
¿Cómo se manifiesta el asesinato psicológico?
Los perpetradores del asesinato psicológico utilizan una variedad de tácticas manipuladoras para controlar y degradar a sus víctimas, incluyendo:
- Humillación constante: Comentarios despectivos, burlas, críticas implacables.
- Control y aislamiento: Limitar el contacto con amigos y familiares, controlar las finanzas, tomar decisiones por la víctima.
- Gaslighting: Hacer que la víctima dude de su propia percepción de la realidad, memoria y cordura.
- Negación y culpa: Negar el abuso, culpar a la víctima por su propio sufrimiento.
- Amenazas veladas: Insinuar violencia física o emocional, amenazar con abandonar a la víctima.
Las consecuencias del asesinato psicológico
Las víctimas del asesinato psicológico pueden experimentar una serie de problemas de salud mental, incluyendo:
- Ansiedad y depresión: Sentimientos persistentes de miedo, tristeza y desesperanza.
- Trastorno de estrés postraumático : Reviviscencias, pesadillas, hipervigilancia.
- Baja autoestima: Sentimientos de inutilidad, vergüenza y culpa.
- Problemas de confianza: Dificultad para confiar en los demás, incluso después de escapar del abuso.
- Pensamientos suicidas: En casos extremos, el dolor emocional puede llevar a la ideación suicida.