¿Cuáles son las etapas de las emociones?
Las emociones tienen tres etapas: Función adaptativa, función social, función
motivacional. Uno de los campos más complejos de identificación para algunas
personas es la emoción, somos analfabetos emocionales en el que muchas veces
creemos ser expertos racionales, pero que sin embargo fracasamos en el intento.
Emociones primarias: Todos somos capaces de comprender las emociones primarias
ya que independientemente de nuestra cultura ya nacemos con ellas, sin embargo la
reeducación emocional nos enseña cual es el mejor proceso de socialización.
Conceptos erróneos sobre la emoción: Muchas personas se aferran a conceptos
erróneos sobre la emoción, sanar un alma herida cuesta tiempo, ya que el estrés
postraumático es como un gran monstruo invisible, que te aborda por las noches
haciéndote escuchar la vocecita: “nunca seré feliz”, nadie me quiere, esta emoción
destructiva que devora el alma por completo.
Retención emocional: Alice Miller, una de mis escritoras preferidas, declara en su libro “El cuerpo nunca miente” que cuando reprimimos las emociones sufrimos consecuencias en el cuerpo como enfermedades cardiacas o estrés extremo. Ella tiene razón, podemos engañar a las demás personas pero nunca seremos capaces de engañar a nuestro cuerpo. Cualquier persona que haya sufrido algún tipo de trauma, con el paso del tiempo empieza a retener las emociones como una vía de escape, creyendo que si no demuestra lo que siente a las demás personas, no la tendrán como débil.
Estructura:
La función adaptativa: es la conducta más importante del ser humano ya que prepara nuestro cuerpo anti cualquier situación.
La función social: Es la que nos permite si comunicar con las demás personas e también demostrar sentimientos.
Los traumas nos corrompen por dentro y nadie, absolutamente nadie, puede recoger el camino de la vida durante mucho tiempo con el alma rota, la mente fragmentada y el corazón erosionado.
Los traumas que hemos vivido en el pasado no nos convierten en lo que somos, ya que si deseamos podemos trabajar con nuestra realidad interna y dibujar un nuevo presente.