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Es tan bonito cuando conocemos a alguien y empezamos a sentir algo por esta persona… La sensación que hay es que todo nuestro cuerpo está dominado. No conseguimos pensar, la razón se pierde por la emoción, los poemas tienen un sentido tan lindo hasta para los que nunca fueron capaces de leer un poema, ni siquiera en primaria.

Las canciones acceden hasta el alma, las lágrimas caen, el enamoramiento es inevitable, te quedas a veces distraído, con el pensamiento en el aire. Quieres, con esta persona, poder compartir cada minuto de tu vida, tus secretos, empiezas a idealizar.

Idealizar: considerar una persona o cosa como modelo de perfección.

La mayoría de las personas emotivas tienen el riesgo de idealizar, transformar personas normales en superhéroes.

Buscando que estas personas llenen el vacío que hay en su interior, el amor eros no permanece, es algo que una hora u otra se termina, no es permanente como algunos desean.

La confusión es grande. ¿Por qué? Pues… Estamos mal acostumbrados, pensando que este amor, platónico, cruel, violento, es AMOR, la posesión, donde tú eres mío, vamos a estar juntos hasta la muerte, las promesas incumplibles (que causan después la depresión).

Eros es erótico, tan dominador que descontrola los sentimientos: celos incontrolables, ira, no puedo vivir sin ti. Y creo que la mayoría de los locos estos que matan a sus mujeres es por esto, donde el dominador piensa: «si no estás conmigo tampoco te quedarás con nadie».

Cuando hay eros también se une la mentira, para conquistar lo que se desea. La persona sabe que, si la otra la conoce cómo es, podría no aceptarla y entonces usa la mentira como la única manera de conseguir su objetivo.

La primera faceta es decir que tiene los mismos gustos; después, la manipulación emocional (estaré siempre contigo, eres lo que buscaba, jamás te voy a decepcionar, etc.).

La persona está tan enferma emocionalmente que busca llenar las lagunas que desde la infancia no fueron atendidas por sus padres.

Promesas

Con certeza has conocido a muchos que te han hecho millones de promesas. Estos individuos, los Eros, necesitan de algo para atrapar sus presas.

Les considero muy inteligentes, pues saben cómo atrapar a alguien de la misma forma que un cazador; ellos no son impulsivo, por el contrario, dedican tiempo para saber cómo reaccionar. Hay personas desconfiadas que no lo ven tan fácil en todo lo que se les dice; otras más confiadas que, pobres, son las presas fáciles.

La primera cosa que hará es decir algo que pueda convencer a —la llamaremos— la persona Y. Dependerá de algunos factores el que Y sea presa fácil.

  1. Convivencia familiar.
  2. Aspectos emocionales.

Cuando hay problemas en una familia, el adolescente busca ayuda en amigos. Cuando es algo relacionado con el enamoramiento, el sujeto que sufre idealiza a este alguien que pueda suplir su carencia.

El mentiroso, que es una persona también carente de atención, sabe dónde atacar, deduciendo los puntos flacos del sujeto Y (la persona idealizada).

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